Cabalgar no es sólo andar a caballo. Es asimilar el paisaje a un ritmo diferente, al paso y lomo del animal que fue el principal medio de transporte. A partir de ahí, cabalgar también implica repasar los trillos de la historia del país, del gaucho, de los libertadores y encima: hacerlo de un modo activo, porque este andar mueve músculos y esqueleto como cualquier otro deporte.

Varios han tomado nota de estas particularidades y ofrecen cabalgatas por todo Uruguay: por la costa, las sierras o pradera. Un mercado de turismo equino que galopa a pasos agigantados desde hace algunos años. Lo dice Carmen Passarella, de la estancia El Ceibo. "La gente se suma cada vez más; no sólo por el valor turístico, de paisajes, sino también porque la cabalgata es terapéutica y un deporte. Ahora que se tiene más conciencia de la actividad física y se sale a andar en bicicleta o correr, la cabalgata también se ha desarrollado mucho en ese sentido".

El Ceibo, estancia ubicada en Florida, cuenta con varias propuestas para conocer las praderas limpias de la zona a paso de caballo. Quienes estén alojados allí, pueden tomar por una vía clásica e iniciática: montar un caballo y lanzarse a andar por un rato. Si no conoce demasiado de este tipo de conducción, siempre habrá algún baquiano que lo instruya.

La segunda opción, más avanzada, consiste en una cabalgata de todo un día por la región, una propuesta que han tomado muchos uruguayos, según Passarella. "Son grupos de amigos y amigas, que se interesan por andar a caballo y lo toman con mucho profesionalismo", añade.

Para turistas internacionales, El Ceibo organiza una cabalgata que se parece más a travesía: seis días a caballo, 70 kilómetros por jornada. Se hace en Florida, pero también con tramos en Paysandú. El circuito incluye las paradas para dormir, todas las comidas e ida y vuelta al aeropuerto. El vínculo se hace por lo general a través de agencias de turismo especializadas justamente en cabalgatas y los turistas encuentran atractiva la penillanura, aquello del horizonte lejano. "Estos grupos vienen por lo general en primavera y otoño. Lo hemos hecho con estadounidenses, ingleses, holandeses", agrega Passarella.

Ella hace hincapié también en la formación. Andar a caballo no sólo es montar, sino que implica una serie de aprendizajes y comunicación con el animal, como todo trabajo en equipo.

LUNA LLENA. El verano pleno, sin embargo, enlentece en algo esta actividad debido a que el sol pica fuerte en los jinetes y caballos. Pero también crece la tentación por recorrer la costa a paso de cabalgata.

El fin de semana del 6, 7 y 8 de febrero habrá luna llena y la firma Huellas, cabalgatas por Uruguay, organiza un recorrido a caballo por las costas de Rocha que han llamado "Cabalgata de luna llena", porque varios tramos se harán por la noche, iluminada apenas por la penumbra lunar. Salen de La Pedrera hacia la Laguna de Castillos por lo que el recorrido no sólo incluye mar, sino los palmares y el ecosistema de lagunas.

Pero lo mejor es que acompaña la travesía un historiador de la zona, que contará la historia y leyendas del lugar. Se duerme en carpa o el que guste puede optar por otro alojamiento, asegura una de las organizadoras, María Inés Rovella, de Huellas. Y habrá fogones, el ámbito ideal para una guitarreada o una buena rueda de cuentos. El resto del ambiente correrá por cuenta de la luna.

Para marzo, Huellas organiza otra cabalgata de tres días, pero esta en vez en Tacuarembó que por esas fechas celebrará la fiesta de la Patria Gaucha.

Las cabalgatas cuestan entre 500 y 1.200 pesos el día, aproximadamente. Depende del recorrido y si incluye alojamiento y comidas.

ATARDECER SERRANO. Laura Michelini creó hace algunos años la guía Recorriendo Uruguay, de turismo rural. A partir de ese libro, fue que varias personas empezaron a pedirle la posibilidad de armar circuitos a caballo y lo hizo: organiza en Florida, Rocha y en las sierras de los Caracoles, cercanas a San Carlos, Maldonado. Allí se ha instalado un parque eólico, así que hasta podría hacerse una quijotesca maniobra contra los molinos.

Michelini da más detalles: "En las sierras, tratamos de jugar con el sol. Llegar al atardecer, por ejemplo". Los programas dependen los grupos y su interés, aunque por estas fechas de sol picado, la demanda se reduce. Michelini propone a la vez un curso de equitación campera básica para los primerizos.

El Centinela, una estancia en las Sierras de las Ánimas (Maldonado) también ofrece la posibilidad de cabalgatas, actividad muy demandada cuando se nubla en Punta del Este. Se anda por los circuitos y las abras de esta cadena serrana.

Sólo hay que llegar, montar y lanzarse a descubrir el paisaje y la historia.

La Agenda de los Galopes
El Ceibo. Estancia turística en Florida que ofrece varias modalidades de cabalgatas: desde un día hasta seis. Este verano, además, llegan de Italia dos profesionales en equitación que estarán desde el 10 recibiendo e instruyendo a los visitantes en el arte de andar a caballo. Tel: 035 29953.

www.cabalgatasuruguay.com

Recorriendo Uruguay. Organiza cabalgatas por las praderas de Florida, las sierras de Maldonado y también la costa rochense. Hay circuitos por un día y también de varios. El máximo de los grupos va desde las 12 a 15 personas. Tel: 094.276.194

www.recorriendouruguay.com.uy

Huellas. Prepara para el fin de semana del 6, 7 y 8 febrero una cabalgata de luna llena por Rocha. Y otra para marzo en Tacuarembó, en ocasión de la fiesta de la Patria Gaucha.

Tel: 099 615 094

www.huellascabalgatas.com

El Centinela. Estancia en Sierra de las Ánimas que ofrece cabalgatas por la zona. Tel: 049 02262

por M.B. para El País
publicado por El País Digital