Y hay razones valederas para la confusión; hablamos; nos vestimos; comemos; oímos; vemos: leemos y hasta bailamos, casi igual o lo mismo, respectivamente.

Desde la Colonia, salvo en algún momento del peronismo y ahora, ha reinado la fraternidad, la concordia y hasta el compincherío; para muestra recordemos el empate en el Centenario que nos llevó a Corea-Japón 2002.

Hay tal mezcla de todo tipo que es difícil de analizar en su totalidad: hay vínculo rioplatense en temas tan diversos como: sangre, negocios,arte,cultura,ciencia, deporte, política y obviamente, historia, entre tantos otros.

Pero siempre existieron  "algunos porteños de mierda" y "algunos uruguayos muertos de hambre" y esporádicamente, también, los gorilas rioplatenses de épocas oscuras y especies, coyunturalmente negativas, dañinas,patoteras, como los actuales pingüinos.

Los porteños de mierda y los uruguayos muertos de hambre, históricamente se han adjetivado así, en forma recíproca

Y todos los demás,la inmensa mayoría del pueblo argentino y la inmensa mayoría del pueblo uruguayo, tenemos que aguantarlos.

Generalmente, las especies descriptas, tienen poder y a la fuerza, marcan tendencias.

"A la fuerza", no se refiere estrictamente a la violencia, generalmente marcan tendencias a través de los medios.

Los sanos de mente de ambas orillas, repartimos nuestros afectos y nuestra admiración, en forma cruzada, por similares tipos de referentes: para un Borges o un Cortázar siempre habrá un Benedetti o un Galeano. Para un Artime, habrá un Walter Gómez y para un Rattín un Goncálvez.

Entonces, aparece la inmundicia alevosa y criminal de los corruptos "llena cabezas" que aterrorizaron al pueblo entrerriano hasta el punto que hicieron imposible la marcha atrás.

Y a esa acción criminal, la avala un gobierno al que no le conviene ignorar a ese pueblo porque necesita sus votos para la reelección o para el triunfo de la delfina K, como al final sucedió.

Todos saben que Botnia contamina lo normal. Quizás la millonésima parte de lo que lo hace el Riachuelo o las pasteras obsoletas argentinas.

Todos saben que Uruguay no violó ningún tratado: todos conocen la historia del ex-canciller panqueque que se dio vuelta en mitad del camino.

Entonces, el gobierno de un país serio que aceptó la instalación de una empresa finlandesa para que construya una planta, cuando esa planta estuvo pronta, le dio la autorización para que empiece a funcionar ¿o la inversión y la construcción de la planta no era para eso?

Y llega el lunes 10 de diciembre y asume la delfina de Kirchner, su esposa, Cristina Fernández.

Y en el acto de asunción, sin anestesia y desde lo alto de la carpa del circo del que asumía el máximo poder, le pega a un invitado, nuestro Presidente, que estaba inhibido de responder por protocolo pero, fundamentalmente, por educación, por clase.

Y como en el fútbol; a la semana, la trasmisión de mando de la Presidencia Pro Témpore del Mercosur, le presenta en bandeja la chance de revancha a Tabaré. Idéntica situación a la inversa; un sólo cambio y radical: el escenario.

El Doctor Tabaré Vázquez, desde lo alto del marco de la Institución Presidencial de su país serio, le transfiere el mando a  la presidenta de los argentinos, por los próximos seis meses del bloque regional, con un discurso correcto, sin ninguna alusión a nada que no fuese lo puntual.

Todavía, para regocijo nuestro y de todos quienes esperábamos esa actitud, le agrega: "ningún argentino es extranjero en tierra oriental".

La historia se va alimentando con el transcurrir del tiempo; por eso, el tiempo es el que pone las cosas en su lugar.

La historia, por encima de lo anecdótico que dictamine la Corte Internacional de La Haya, dirá que Uruguay fue perjudicado, agredido, difamado y provocado.

La historia concluirá, diciendo que Uruguay se mantuvo serio, soberano, digno como nos gusta a los rioplatenses, a pesar de algunos porteños, algunos uruguayos, algunos gorilas y algunos pingüinos.Nos vemos.