En estos próximos cinco años, hay un soberbio desafío para toda la actividad, para el sector público y para el privado y es el de consolidar la sinergia que espontáneamente ha aparecido en el período que finaliza.

Hay un muy buen ambiente, hay muchas coincidencias y las principales metas son comunes pero, existen aún muchas asignaturas pendientes y es por allí que se debe trabajar.

A nuestro entender,algunas de  esas asignaturas son:

* La actividad privada en lugar de reclamar al sector público mayor protagonismo, debería negociarlo al comienzo del período y dejar establecido un estilo de trabajo. Se ha escuchado y leído que el sector público hace y luego comunica y algunos directivos privados han reclamado participar del "hacer".

* Públicos y privados deberían consensuar y luego difundir trabajos, rotulándolos como logro de la actividad y no de un sector u otro.  

* Debería establecerse una clara política de oportunidades para los consultores nacionales y de alguna manera, controlar la idoneidad de los extranjeros contratados.

* Debería hacerse causa común, en el reclamo de un presupuesto idóneo para la cartera.

Pero lo más importante es el reconocimiento a la actividad por parte del futuro gobierno, las primeras señales son muy alentadoras, habrá que aprovechar el viento a favor. Nos vemos.

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