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Martes, 25 Mayo 2010 07:28

Mayo, ese mes especial

El de la Revolución que derrocó al Virrey Cisneros en Buenos Aires en 1810 y el del año siguiente que vio a Artigas en Las Piedras, derrotar a Posadas.


Pero  un siglo y medio más tarde de esos hechos, en Francia,de alguna forma hubo otra especie de revolución que no tumbó al gobierno pero lo hirió de muerte y marcó un hito en la historia del mundo, también en mayo.

Los criollos en Buenos Aires formaron el primer gobierno y comenzaron de esa forma el lento camino hacia la Independencia; los orientales mientras tanto, deberían esperar aún más tiempo, para lograrla en 1825.

Pero en París, los sucesos del "Mayo francés" se encuadran dentro de una ola de protestas protagonizadas, principalmente, por sectores politizados de la juventud que recorrió el mundo durante 1968.

Según los registros, estos sucesos se extendieron por la República Federal Alemana, España, México, Uruguay, Estados Unidos o Checoslovaquia (Wikipedia).

Buenos Aires ahora, 200 años después

Más de un millón de personas vieron cantar a Victor Heredia, a Los Jaivas, a Pablo Milanés y a Jaime Ross, entre otros, compartiendo escenario con León Gieco y emocionando, cada uno de ellos, con su mensaje con sus canciones.

Y es en esas cirscunstancias, es en esos instantes sublimes de la música y del festejo en el recuerdo de conquistas épicas, que los pueblos se unen, que todos se olvidan de las idiotas cuestiones que ocasionalmente los dividen y no hay dramas étnicos ni problemas de límites, no hay asimetrías y tampoco puentes cortados, simplemente hay comunicación y hay abrazos, hay sonrisas y miradas y palmas y vivas y banderas, como debe ser, como siempre, debería ser.

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