solis-slider-intro-1920x400
mausoleo-slider-intro-1920x400
mvdmausoleoslider-intro-1920-400
pocitosslider-intro-1920-400
Miércoles, 04 Febrero 2009 07:22

El sentido de lo humano: El castigo corporal.

 por Luis Alejandro Rizzi

La crónica cuenta que una persona en Irán lanzó acido contra la cara de una chica  provocándole una ceguera irreversible. Fue juzgada por los tribunales y la Corte Suprema acaba de confirmar la pena que lo condena a recibir diez gotas de acido sulfúrico en cada ojo hasta quedar ciego.

 
No dudo en calificar como atroz la acción del  condenado y merecedora de un severo castigo.

Pero tampoco dudo en calificar como “atroz” la pena impuesta, impropia de cualquier sistema legal.

La justicia es mas bien una virtud que consiste en el arte de saber dar a cada uno lo que le corresponde o pertenece y lo que “corresponde y pertenece” puede ser un justo castigo valga la redundancia.

La venganza huele mas a “satisfacción”, “goce”, por haber podido retribuir de la misma forma  el daño sufrido. Diría que es una forma muy primitiva de “justicia personal”.

La Real Academia la define como “satisfacción que se toma del agravio o daño recibidos”.

La Justicia entendida ahora como proceso para llegar a la justicia como virtud, intenta reconstruir el hecho llevado a juzgamiento y sobre todo en el ámbito penal a ponderar  lo que llamamos “imputabilidad” que es lo mismo que decir la capacidad de comprender la acción criminal.

La venganza prescinde de estos “eufemismos” y retribuye en la persona victimaria o su familia el daño recibido. Lo que busca el vengador es más que nada “satisfacción”.

La justicia como virtud tiene que ver con el respeto, y hace a la “auctoritas” del estado como ejemplaridad y certeza, es decir se sabe que quien viola la ley tendrá su castigo y que este se cumplirá efectivamente.

En lo personal podemos comprender la venganza como sentimiento especialmente ante hechos en que existe una larga diferencia de fuerzas o capacidades entre la víctima y su victimario, por eso hay delitos que incitan a lo que se da en llamar “justicia por mano propia”, que no es mas que poner en acción los mecanismos de la “venganza”.

Ahora bien en la vida institucional de los países, el Estado no puede convertirse en “vengador” e institucionalizar la “venganza” y establecer la simetría de la acción como medida de la pena.
 
El estado no puede convertirse en un repartidor de “satisfacciones personales”.

Esto es retroceder a las épocas más remotas de la historia cuando el pensamiento aun no había nacido.

El castigo justo consiste en apartar de la sociedad a la persona para su propia protección, evitar la eventual tendencia a la reincidencia y para protección de la sociedad ya que la persona que ha provocado un daño, por lo menos en teoría debería recuperar su libertad una vez cumplida la pena y si tiene capacidad para reintegrarse a la vida social.

Por eso las cárceles deben ser limpias y sanas para seguridad y reeducación de los condenados.

La pena impuesta a este “pobre iraní”, nos debe causar repugnancia no solo porque viola las garantías más elementales de cualquier sistema penal e impide en cierta forma a la persona afectada su derecho a reinsertarse  a la sociedad, sino también porque es una pena indigna de la calidad humana.

Sin embargo hoy día nos hemos acostumbrado a otras crueldades o castigos corporales que son también lesivos a la dignidad de la persona y en esta “anormalidad” que se esta volviendo normal, la pretendemos elevar a la categoría de “derecho”.

Me refiero al “aborto”,  acción de mayor  crueldad que el castigo impuesto al iraní que motiva esta nota.
Por lo menos a ese pobre desgraciado le queda la vida cuya dimensión va mas allá de la capacidad de ver, el aborto está lisa y llanamente castigando una vida inmaculada, una vida que no tiene culpa alguna, una vida que representa el momento más puro de la existencia del hombre.

Va de suyo que el castigo corporal atenta contra el “sentido de lo humano”.
 
Como hemos visto la pena a recibir diez gotas de acido en cada ojo, es probable que con toda razón genere repudio universal, el aborto está a punto de convertirse en derecho… ¿me lo pueden explicar…?