Estimado Antonio:
Te escribo como consecuencia de la nota que publicaste en el día de
ayer firmada por el Sr.
Luis Alejandro Rizzi, a la cual me permito
realizar el siguiente comentario.
Si bien las "ofertas tóxicas" pueden ser un elemento distorsivo del mercado, no aparecen como relevantes si lo comparamos con los subsidios que los Estados les otorgan a sus líneas aéreas, sin dejar de mencionar el proceso de bancarrota americano que no es un tema menor.
Hablar de "ofertas tóxicas" es incursionar en un terreno conceptualmente muy intrincado que no deja de ser interesante para comentarlo, pero el tema es tan vasto y abarcativo que excedería el propósito de tu publicación.
Por lo demás, nada nuevo bajo el sol, el proceso de consolidación de ciertas aerolíneas y la desparación de otras, alienta a nuevas compañías a ocupar los nichos de mercado que se van creando y/o abandonando por aquellas que se retiran.
Hoy las empresas referentes se llaman A, B, C. Mañana serán A, C+B, N, X.
Saludos
Daniel
Nota de Dirección: Daniel Labruna es uruguayo, abogado, asesor de varias aerolíneas, entre ellas SOL y TACA.