Hago esta aclaración porque desde el miércoles pasado tuvimos conocimiento de conversaciones “informales” entre los gobiernos español y argentino para encontrar una solución incruenta al caso AEROLÍNEAS ARGENTINAS.
 
El diario CRÍTICA en su edición del sábado 29 hizo pública dicha presunta negociación “secreta” entre MARSANS y el gobierno, que prefiero por ahora llamar “conversación”.

Lo cierto es que la Presidenta Fernández de Kirchner, que pareciera que estuviera intentando darle un rumbo diferente a su gestión habría autorizado o más bien instruido a algún funcionario de su confianza para que exploren la posibilidad de evitar la expropiación resuelta el pasado 13 de noviembre y ya con trámite avanzado en el Congreso de la Nación a tal punto que el proyecto de expropiación quedaría convertido en ley en la tercera semana de diciembre.

Quizás este cambio de rumbo tenga que ver con la creación del Ministerio de la Producción y la designación de Débora Giorgi como Ministra.

“La turca”, como la bautizó  Juan Carlos Casas en sus inolvidables “DIALOGUITOS EN LA CITY” que publicaba el diario LA NACION, es una mujer de carácter, con autoridad, muy profesional en su trabajo y que no acepta los métodos patoteros para conseguir objetivos políticos como los que se usaron entre otros contra los dueños de AEROLÍNEAS ARGENTINAS.

Si la cuestión AEROLÍNEAS ARGENTINAS pudiera finalizar en un acuerdo podríamos decir que algo diferente, no se si mejor o peor, podría pasar en nuestra vida política.

Así como tuve la información confieso que ignoro cual podría ser la base de esa “negociación”, CRITICA insinúa que podría ser que MARSANS retenga un porcentaje minoritario del capital de AEROLINEAS ARGENTINAS

Nuestros informantes nos aclaraban que  el gobierno se habría anoticiado que la expropiación y la desaparición de MARSANS del paquete accionario podrían hacer caer los contratos de leasing o algunos de ellos ya que el país permanece en default.

Algunos osan decir que esa es el “arma secreta” de Pascual Arias y Díaz Ferrán sin perjuicio de la demanda que podrían promover contra el país por una suma superior a los MIL MILLONES  de DÓLARES.

Lo cierto es que “algo” está pasando mas allá del proyecto de expropiación.