Varias aerolíneas mexicanas solicitaron que el gobierno les de un auxilio, en la búsqueda de mantener en pie a una industria que no puede absorber las fuertes subas de los precios del combustible,  y ante una fuerte competencia que dificulta aumentar los precios de los pasajes.

Las aerolíneas solicitaron al presidente Felipe Calderón que existan condiciones equitativas en el mercado de los combustibles, que se encuentra bajo el férreo control del monopolio estatal de Petróleos Mexicanos (Pemex), incluyendo la posibilidad de un subsidio por parte del gobierno al combustible para aviones.

El estado mexicano subsidia desde hace años la gasolina, el diésel y el gas, en un programa que costaría unos 19.000 millones de dólares este año, cuatro veces más que en el 2007.

Pero fuentes del gobierno mexicano han expresado  que aunque el Gobierno está muy preocupado por los problemas del sector aeronáutico, no considera que deba subsidiarse a una industria que atiende casi únicamente a la población de mayores ingresos.

Esta decisión se basa en el entendido que sólamente el 5 por ciento de la población de mayores ingresos utiliza aviones. Las mismas fuentes gubernamentales expresaron que tampoco se puede obligar a las aerolíneas a que continúen volando a destinos que producen pérdidas.

Redacción Portal del Uruguay
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