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Martes, 09 Octubre 2007 04:20

Pasar la página

 09 OCT 07 PDU
Este artículo es una invitación a la inmensa mayoría del pueblo argentino y a todo el pueblo uruguayo.

A partir de la decisión anunciada ayer por nuestro gobierno, deberemos todos, pasar la página y dejar, en la más absoluta soledad, a quienes no entienden razones y quieren justicia por mano propia; no más prensa, no más comentarios, que se queden solos.

Los piqueteros entrerrianos, en el colmo de la desfachatez, ¿se indignan porque les cercenan la libre circulación? ¿es que estamos todos locos? ¿En dónde vive esta gente? ¿Qué fue lo que hicieron ellos bloqueando puentes?

En la anterior incursión a la Plaza Independencia cuando la Cumbre Iberoamericana y en estas dos incursiones al litoral uruguayo, lo que buscaban, lo que intentaban, era la reacción del pueblo uruguayo.

Esa reacción no se ha materializado, gracias, exclusivamente, al tino y sabiduría de nuestro gobierno y nuestras fuerzas policiales y militares. De no ser por esa salvaguarda, otros gallos hubiesen cantado. Seguramente, los provocadores, hubiesen logrado el o los muertos que buscaban para convertirlos en mártires y ponerle perennidad a su reclamo.

Bastante paciencia y tolerancia ha habido hasta este momento; quienes trabajábamos en turismo en las épocas de oro de la Copa Libertadores, en los 60 y 70, recordamos muy bien el trato que nos dispensaban las hinchadas de Independiente, Estudiantes, River y demás equipos, cuando íbamos llevando grupos de Peñarol y Nacional a sus estadios. Ese trato estaba bastante lejos de la tolerancia y la paciencia.

Como país chico, de fuerza militar, ante eventuales conflictos bélicos, casi inexistentes, debimos guardar violín en bolsa ante provocaciones alocadas, respaldadas por un gobierno central bastante parecido a los asambleístas entrerrianos.

Pero lo que nadie podía seguir garantizando, era la calma, la paciencia, la tolerancia, individual; todo tiene un límite y en el "mano a mano", siempre estuvo pareja la cosa, allí no hubo nunca grandes ni chicos.

Por todo esto, en total acuerdo con la inmensa, casi absoluta mayoría del pueblo argentino, refrendada por los comentarios en los diarios digitales de las últimas horas, de aquí en más, argentinos y uruguayos `pongámonos a recomponer nuestra relación fraternal; demos vuelta la página y dejemos que sigan chapoteando odios a los que no entienden nada.

Consejo Editorial del Portal