en cuanto al trato de los pasajeros... aunque todavía hay algunas gratas excepciones.

Sin duda en las aerolíneas comerciales el trato al viajero decayó mucho en la última década. El precio del petróleo sumado a todo lo que surgió como consecuencia al atentado del 11 de septiembre hizo que las aerolíneas redujeran costos, y entre esas reducciones al parecer no se consideró como fundamental el que el pasajero siguiera manteniendo cierta comodidad.

Parecen haberse olvidado que el que paga el billete es el que viaja, y que por lo que se paga por el pasaje se espera al menos un trato digno. Un verdadero viajero no quiere viajar en avión simplemente para llegar a su destino, sino que quiere "disfrutar" ese viaje: el viaje es parte del disfrute, no algo que tiene que pasar rápidamente como el dolor, por algo se es "viajero", no simplemente un "turista en tránsito" (de paso, esa denominación debería por esto ser erradicada de los aeropuertos).

Parece que quieren que nuestra filosofía de viaje sea similar a la del ganado, que simplemente es "transportado" hasta su destino. Pero no señores, lo que se transporta en todo caso es el equipaje, la gente "viaja".

Las grandes líneas aéreas dan poco o nada que comer en vuelos cortos (ya no hablemos de los cubiertos de plástico que se rompen...), los asientos suelen tener una separación entre sí en función del estándar liliputienses medio (personas enanas, para el que no entendió). Las azafatas dejan mucho que desear en su trato muchas veces, y ya no hablemos de lo que pasa con el equipaje... si llega... Pero no seamos fatalistas, por suerte no siempre sucede esto, ni siquiera en la misma compañía: depende un poco del vuelo que nos toque, por decirlo así... pero no podemos negar que algunas aerolíneas son malas CASI siempre, pese a ser en teoría "grandes aerolíneas". En esto no podemos bajar el pulgar cual Cesar en el Coliseo y decir "debe morir" o "tal o cual es peor", porque cada uno debe hacer su experiencia, que muchas veces varía dependiendo (precisamente) de la suerte personal, de la experiencia en vuelos que uno tenga.

Las aerolíneas de bajo costo para algunos tienen justificado cierto trato "rústico" para con los pasajeros. En nuestra opinión basada en la experiencia, esto es simplemente una excusa que no debe ser aceptada. Y creemos esto porque vemos que algunas línea aéreas de bajo costo son realmente buenas, incluso mejores que las grandes aerolíneas.

Fuente: andinia