ningún acuerdo, lo acusan de trabar toda negociación posible.

Argumentan que el jerarca no tiene "cintura" para negociar, además de entender que lo ofrecido por éste es irrisorio.

Por su parte el Ministerio de Defensa continúa firme en su posición de mantener la oferta, a lo que se ha agregado el hecho de manifestar que en caso de seguir las medidas que afectan los servicios en el Aeropuerto de Carrasco, se verán obligados a descontar de los sueldos de los controladores por las horas no trabajadas, tal como detallamos en nota ya publicada.

Al probable descuento se suma ahora la chance de que el Poder Ejecutivo declare la esencialidad del servicio.

Una tercera pata de esta historia la presentan las compañías aéreas que se sienten perjudicadas por las medidas adoptadas por los controladores.

Unos días atras algunas ya han expresado que de mantenerse esta situación evaluarán retirarse de nuestro país.

Incluso desde PLUNA se han escuchado expresiones sobre una serie de demoras y retrasos fundamentalmente en las conexiones que la compañía tiene en la región.

Sin ir mas lejos este fin de semana pasado, según una solicitada publicada en El País del domingo, Pluna volvió a señalar que se produjeron demoras del órden de los 65 minutos,(tal cual publicásemos en el artículo La incidencia del conflicto de los ATC en Uruguay: PLUNA estaría perdiendo u$s 4 millones)  lo que no es aceptado por los controladores que atribuyen esas demoras a "mala gestión de la empresa".

Ahora los controladores manifestaron que solicitarán que el Presidente de la República Tabaré Vázquez, los reciba para que los escuche y de esa forma conocer de primera mano sus reclamos y así poder destrabar el conflicto, por entender que el Ministro Bayardi no presenta capacidad negociadora suficiente.

Desde el 1º de julio, los vuelos en el Aeropuerto Internacional de Carrasco sufren demoras de 10 minutos a causa de las medidas gremiales que los controladores implementaron para exigir mejoras salariales.
 
El jueves anterior se realizó una asamblea donde se analizó la propuesta del Ministerio, considerándola ridícula y además agregando que "se amenaza con descuentos, eso es represión" según nos expresó el presidente del gremio, Fernando Reyes.

La Cámara aeronáutica también brindó su punto de vista, expresando que se está brindando una pésima imagen de nuestro país en el exterior y que de continuar este conflicto las líneas aéreas internacionales podrían optar por cambiar su destino a otro aeropuerto de la región, como Ezeiza.

Lo cierto que que todas las partes deberían sentarse e intentar destrabar el conflicto, dejar el fuego cruzado, sin declaraciones rimbombantes ni amenazas porque de esa forma lo único que se logra es ahondar el problema.