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Eso hace referencia a los precios que se manejen por estos días y las próximas semanas, que pueden ser claves para que muchos argentinos decidan su lugar de veraneo, entre la costa bonaerense, las playas brasileñas o los balnearios orientales.

El presidente de la Asociación de Inmobiliarias de Punta del Este, Sabás Pereira, dijo a LA NACION que esa cámara empresarial emitió una recomendación a los propietarios de mantener los precios en dólares de los contratos del verano pasado. Pero también admitió que los que buscan una renta con el alquiler se enfrentan a una inflación del 7% y a una baja del dólar de 24 a 20,7 pesos uruguayos. Pereira dijo que el cierre de contratos no ha avanzado mucho, pero que eso es típico de lo que ha ocurrido años anteriores. "Esperamos una buena temporada", comentó.

Este fin de semana largo, que en octubre de otras épocas era un medidor de anticipo del turismo veraniego por contratación de arrendamientos, vivió una afluencia significativa de público, que colmó hoteles, restaurantes y comercios. Las ganas de hacer playa fueron más fuertes que el viento y que el fresco que dominaron el sábado, y muchos veraneantes tomaron sol y hasta se animaron a meterse en el agua.

En voz baja, tanto autoridades como empresarios del sector, cada primavera especulan sobre posibles medidas de tipo económico que pueda adoptar el gobierno argentino y que por alguna vía perjudiquen la recepción de turistas. Cuando se les pregunta qué tipo de medidas pueden temer en el horizonte político, las respuestas son de incertidumbre. "La creatividad argentina ha encontrado múltiples instrumentos, desde el tipo de cambio hasta controles tributarios intimidatorios; lo que sea", comentaba el fin de semana un veterano operador turístico.

La semana pasada, el gobierno uruguayo inauguró el nuevo aeropuerto de Carrasco, moderno, amplio y con mejora de los servicios, que tiene gran capacidad para el flujo turístico. Pasada la fiesta, comenzó a prepararse el inicio formal de las operaciones, que está previsto para noviembre.

Además, se ha construido una doble vía rápida para la salida de la terminal aérea hasta la ruta interbalnearia uruguaya.

También está casi lista la terminal de pasajeros del puerto de Colonia, que permitirá mayor comodidad de traslado para los argentinos que llegan por esa vía, muchos de los cuales lo hacen en automóviles.

El fin de semana largo no tuvo un tiempo propicio para paseos al aire libre; anteayer, eso fue posible por más voluntad que condiciones meteorológicas, pero ayer el día mezcló lluvia tempranera con nubes y niebla por la tarde. Los centros comerciales aprovecharon la afluencia de público.

Hoteles, a pleno

El presidente del Centro de Hoteles de Punta del Este, Fernando Massa, informó que el fin de semana se trabajó prácticamente con capacidad completa y que los hoteles de mayor calidad recogieron más demanda. El Conrad estuvo al 100% y ya tiene reservas muy fuertes para fin de año y principios de 2010, cuando se concentre el visitante brasileño.

Pero son los argentinos los que mueven la plaza turística oriental. En el primer semestre, Uruguay recibió 1.050.536 visitantes, de los cuales 573.728 fueron argentinos, seguidos por 149.939 brasileños y casi 128.000 uruguayos que viven en el exterior, pero pasan sus vacaciones en su propio país. Ahora esperan aumentar esos valores.

El presidente de la Cámara Uruguaya de Turismo, Luis Borsari, expresó optimismo y cautela por la próxima temporada, entusiasmado por alquileres altos que se concretan en José Ignacio.

Los alquileres que se cierran primero son los de chacras playeras, después los comercios de La Barra, las casas más grandes y, por último, los departamentos. La oferta inmobiliaria se amplió mucho por la construcción de torres modernas sobre la Mansa y la Brava, que incluyen servicios de recreación, deportes y seguridad propia.