El cocinero español Ferrán Adriá, uno de los personajes públicos que más
ha contribuido a la promoción internacional de España durante los
últimos años, anunció ayer que su restaurante El Bulli, tres estrellas
Michelín, estará cerrado al público los años 2012 y 2013.
Esto no significa su retirada, ya que los fogones del local seguirán encendidos para seguir trabajando en la creación gastronómica.
En una multitudinaria rueda de prensa celebrada en la VIII Cumbre Internacional de Gastronomía Madrid Fusión y acompañado por su socio, Juli Soler, Adriá ha querido atajar cualquier especulación: "lo triste habría sido decir que ya he aportado lo que tenía que aportar".
"A partir del 2014 El Bulli va a ofrecer comida de alguna manera, seguro", ha insistido, y ha negado que la presión de las estrellas que otorga la guía Michelín le haya hecho tomar esta decisión, toda vez que necesita "presión para crear, porque sin presión no hay creatividad".
"Vamos a trabajar todo lo posible para que la cocina española siga ahí arriba" y a "seguir haciendo creatividad", ha asegurado, aunque sin tener "ni idea" ni del formato ni de la financiación.
El formato actual de su restaurante "se ha acabado"
Adriá ha explicado que su reto es saber si hay "más allá" en el porvenir de la alta cocina, aunque el formato actual de su restaurante "se ha acabado", y ha dicho que necesita ese cierre para "reorganizar cómo será a partir del 2014".
Arropado en la rueda de prensa por otros afamados cocineros españoles -Juan María Arzak, Pedro Subijana, Joan Roca o José Andrés- Adriá ha considerado que El Bulli no es "un dogma de la alta cocina, porque cada negocio es un mundo".
"Hay que definir y saber muy bien lo que es la alta cocina", ha aseverado el cocinero, quien ha rechazado que este concepto no dé más de sí, como prueba el hecho de que las estrellas Michelín se hayan multiplicado: "al menos quedan diez años más de creatividad, que no se debe confundir con ruptura, algo que ya se dio en los noventa".
La decisión tiene, además, un componente personal. "No sé estar sin hacer nada, pero también nos
merecemos normalizar nuestras vidas después de 25 años", ha comentado.
"Está claro que cuando volvamos no va a ser igual. Pero ojo, que no van a ser años sabáticos", ha agregado.
El Bulli, situado en Cala Montjoi (Rosas, Gerona), está considerado el mejor restaurante del mundo, galardón que le ha otorgado la revista "The Restaurant Magazine" varios años consecutivos.
Ferran Adriá ha colaborado en varias campañas de promoción turística, entre ellas la que organizó Turespaña en Londres el pasado octubre.
Ferran Adriá, con el director de la Oficina Española de Turismo en
Londres, Ignacio Vasallo, durante una acción promocional desarrollada en
los almacenes Harrod's de Londres, el pasado octubre
fuente: hosteltur