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La aparente retirada de la empresa española Ence o su también aparente re-localización del proyecto, al parecer, le ha colocado alas a la sinrazón argentina.
Las ondas agresivas hacen un itinerario extraño: nacen en Gualeguaychú, pasan por la Capital Federal y en lugar del Uruguay, cruzan el Plata y llegan a nuestras costas.
El próximo fin de semana, como ocurre desde unos cuantos años a esta parte, gran cantidad de argentinos, aprovechando el fin de semana largo por el feriado trasladado del 12 de octubre, llegan a Uruguay con la intención de alquilar casas o apartamentos para sus vacaciones de verano.
Desde el seno de los asambleístas-piqueteros entrerrianos se anuncia la posibilidad de nuevos cortes de puentes. De concretarse la medida, se haría nuevamente oídos sordos al sentido común y se estaría faltando al laudo del tribunal del Mercosur que ya se expidió al respecto.
Como si esto no fuese suficiente, en el día de ayer, el presidente Tabaré Vázquez y el Gabinete en pleno, en decisión para aplaudir, rechazaron "por improcedente", una carta de la cancillería argentina dirigida a la DI.NA.MA. ( Dirección Nacional de Medio Ambiente, salteando nuestra cancillería), en la que exigían que no se construyera una planta de agroquímicos de ISUSA en Pueblo Agraciada, departamento de Soriano, por entender que esta planta tenía como fin, abastecer a Botnia y para ello, debería esperarse el fallo final de La Haya.
Y el colmo de la insensibilidad y el desprecio, lo protagonizó el médico del Club Boca Juniors. Aconsejó a la directiva de su club, no postergar el partido del jueves con Nacional de Montevideo en Salta, por la Copa Sudamericana, pues no era conveniente para el plan de trabajo trazado para el plantel xeneise.
Lo que no tuvo en cuenta el galeno argentino fue, que la solicitud de aplazamiento del club uruguayo se debe a una epidemia de paperas que sufre su plantel de jugadores y que, en primera instancia, le obliga a prescindir de al menos 6 jugadores para el match, entre ellos el arquero titular Bava y la estrella del equipo, Gonzalo Castro.
Para finalizar con un poco de distensión y apelando a lo que nos queda, el humor: tampco tuvo en cuenta el médico boquense, el riesgo al que somete a sus jugadores al tomar contacto con eventuales portadores de un virus altamente contagioso ( hay que ponerlos nerviosos)y por último una reflexión que viene al caso: en ocasiones, las complicaciones generadas por causa de las paperas en el adulto, se reflejan en algo que la actitud argentina nos está haciendo padecer a todos los uruguayos: la horquitis.
Nos vemos.

Sergio Antonio Herrera
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