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Miércoles, 27 Diciembre 2006 18:55

Off Portal: la mirada del Lic. Rafael Ramos.

Compartimos nuevamente, en esta sección, el trabajo publicado hace pocas horas en "Noticias y Departamento 20" de este mismo Portal. El decreto de "Nunca más", la amenaza de bloqueo a la terminal de Buquebus y el último Consejo de Ministros del año, son los temas.

 

NUNCA MÁS

El presidente Tabaré Vázquez decretó que a partir del próximo año cada 19 de junio sea recordado, además del natalicio de José G. Artigas, como la fecha que todos los uruguayos toman para reflexionar acerca de los acontecimientos sucedidos en el país a partir de los últimos años de la década del sesenta y hasta el retorno de la democracia en marzo de 1985. Es así que se decretó el "Nunca más". Con este enunciado el gobierno da por culminada una primera etapa en la investigación acerca de los detenidos desaparecidos durante la última dictadura cívico-militar en nuestro país. Además de esta idea de recordación para toda la sociedad uruguaya, también se establece la fecha del 19 de junio como la única en la cual el gobierno concentrará sus celebraciones oficiales. De esta manera, los feriados tradicionales del 19 de abril, 18 de mayo, 18 de julio y 25 de agosto no tendrán celebraciones desde el punto de vista oficial. Pero más allá de la idea del gobierno de concentrar en un solo día la conmemoración oficial de todas estas fechas patrias, los feriados, ya sean laborales o no, mantendrán sus mismas características para la sociedad uruguaya.

Ya surgen algunos cuestionamientos a la idea de fondo y a la fecha dispuesta para este tipo de conmemoración. Se dice que el "Nunca más" es algo que no se puede decretar. Y está claro, pero no creemos que el presidente haya pensado que él desde su escritorio puede hacer que los hechos que se lamentan "nunca más" se repitan. Lo que el presidente ha querido hacer con la fijación simbólica de esta fecha, es justamente eso, que los uruguayos tengamos un día para recordar y reflexionar acerca de los hechos que no queremos que vuelvan a acontecer entre los uruguayos. Está claro que el "Nunca más" no se decreta, se construye. Con acciones como estas. Y con la valentía de cada uno de nosotros. Respecto a la fecha escogida, el argumento es que se trata de un día que recoge el reconocimiento unánime de todos los uruguayos como el día en que comenzó a gestarse la vida de la patria. Estamos de acuerdo con esto. El día que nació Artigas, fue el día que nació la patria. La única diferencia que tenemos es que hubiéramos preferido un día especialmente designado para el desarrollo de esta idea de recordación. La conmemoración de dos ideas en un mismo día, es como que le quita un poco de fuerza a cada una. Es como si una no tuviera suficiente fuerza por sí misma y hubiera que ayudarla con la otra para lograr un buen resultado. Ambas son lo suficientemente fuertes como para merecerse un día cada una, de manera independiente. Tal vez sea cuestión de costumbre. Pero tampoco es para generar una discusión nacional y postergar los temas verdaderos que nuestra sociedad debe atender. 


BARQUITOS DE PAPEL

A los autodenominados "asambleístas" (piqueteros de Gualeguaychú, Argentina) ya no les alcanza con cortar los puentes que comunican con Uruguay (Fray Bentos, Paysandú y Salto). Ahora para continuar su lucha contra la instalación de plantas de celulosa en territorio uruguayo, las que califican de altamente contaminantes, también tienen la idea de bloquear la salida de los barcos que desde Buenos Aires cruzan el Río de la Plata hacia Colonia y hacia Montevideo. La idea de los piqueteros es no permitir el acceso a la terminal de Buquebús. Debido a esto, para prevenir cualquier tipo de incidentes con los pasajeros que llegan a Puerto Madero (Buenos Aires), la terminal portuaria ya cuenta con un refuerzo en su seguridad.

El gobierno argentino dice que ha dispuesto los medios necesarios para garantizar la libre circulación de los barcos que deban salir desde Buenos Aires hacia Uruguay, así como el libre acceso a la terminal por parte de los pasajeros. Al menos es una señal que el gobierno argentino envía a su par uruguayo: dejamos que hagan lo que quieran, pero no tanto… Es parte de la incoherencia con la que se ha manejado el gobierno argentino en todo este tema. Si algunos  cortan una calle en el centro de Buenos Aires, no demora mucho en llegar la Policía y desalojar a los manifestantes, pero si algunos cortan un puente, de manera ininterrumpida, no pasa nada, es más, envían a las propias fuerzas de seguridad (Gendarmería) para "ordenar" a los manifestantes y legitimar de esta forma toda manifestación en contra de las plantas de celulosa. El presidente argentino dice que no levantará una mano contra un argentino que se manifieste "pacíficamente" en la vía pública, pero sí la levanta para reprimir a los estudiantes en plena capital. No nos engañe más "Señor K": sea un poco más coherente y juegue el papel (perdón…) que le corresponde.


LA ÚLTIMA REUNIÓN

El gobierno se reúne por última vez en el año en el ya tradicional Consejo de Ministros. Seguramente más allá de los temas puntuales que deba tratar, se hará un balance del trabajo de este año. Como siempre, habrá cosas positivas y otras negativas que la autocrítica permitirá analizar para seguir avanzando en esta primera experiencia de gobierno de izquierda en Uruguay. Se reconocerá las diferencias que hay dentro del mismo gobierno, así como se ha reconocido que las hay dentro de la propia fuerza política de gobierno, respecto a muchos temas importantes que el país ha debido y deberá afrontar. Se reconocerá que el país ha avanzado en muchos aspectos y que queda muchísimo también por seguir mejorando.

Oficialmente podrá decirse que el país desde el punto de vista de la macroeconomía cada día recibe mejor puntaje desde los organismos internacionales. También podrá decirse que muchos sectores de la economía se han revitalizado y que otros están en pleno proceso de recuperación. Se podrá decir que el empleo ha aumentado y con ello la calidad de vida de los uruguayos, aunque no hay que confundir el hecho de que haya gente ocupada con el fenómeno del subempleo. De todas maneras en la calle parece haber algo más de actividad.  Pero también habrá que decir que hay muchos sectores que continúan sumergidos. Las calles de Montevideo siguen teniendo gente que pide en los semáforos. Los ómnibus siguen subiendo niños que piden "alguna ayudita por favor" o "cualquier monedita sirve". Por eso a la hora que el gobierno levante la copa en esta última reunión, que no se olvide que están allí porque la gente lo quiso. Y si bien es ley que a fin de año las notas con los organismos internacionales sean buenas, también es ley, o así debería ser, que todos y cada uno de los uruguayos sea dueño de su destino