Con Carlos, hace quizás más tiempo que el  que vive en Santiago, no nos vemos.
Somos contemporáneos, a tal punto que éramos cadetes de agencias de viajes al mismo tiempo; él de ONDA y nosotros de CYNSA.
Fue el creador y artífice de una empresa que marcó toda una época en el Uruguay como lo fue sin dudas Turis Club.
Un buen día, quizás obligado por la realidad, hizo las maletas y cruzó la cordillera.
Desde el 2001, viene gestando lo que en esta temporada, se está convirtiendo en una esplendorosa realidad: la presencia masiva de turistas chilenos en la temporada estival uruguaya.
Si Carlos le hubiese hecho caso a los agoreros de siempre, jamás hubiese logrado lo que hoy ostenta.
Sin esperar a que nadie disponga el "márquetin" real, el que se inicia de afuera hacia Uruguay, le está aportando a Pluna en todos estos años, quizás, los mejores dividendos comerciales en una ruta que nunca fue de las principales.
En su charla con María, le escuché decir que le han dado mucho apoyo desde variuos sectores privados locales y también el Ministerio de Turismo y Deporte. nosotros agregamos que a empresarios como él, hay que multiplicarle el apoyo y copiarle el ejemplo, como por otra parte, lo empiezan a hacer empresas chilenas que le harán la competencia de aquí en más.
Carlos cerró la entrevista con una aseveración, propia de quien sabe lo que hace y está seguro de sí mismo: "que comiencen a operar empresas chilenas en este mercado que nosotros abrimos, es un orgullo y además, nos da mucha felicidad, pues, antes que nada, seguimos siendo muy uruguayos y ésto le hace bien al país".
El abrazo a la distancia y la alegría por el éxito del amigo.

Antonio.