Usted acaba de ganar el Gran Premio Ulysses 2009 de la OMT. ¿Quisiéramos conocer en qué consiste concretamente su labor y por qué cree que ha sido acreedor de tan distinguido galardón?

-El contenido de mi trabajo versa fundamentalmente en la capacitación y educación en el mundo del turismo. He pasado mucho tiempo trabajando con la OMT en el establecimiento del turismo como una asignatura, viajando a muchos países para ayudarlos a insertar este sector en los planes de estudio de sus universidades, ayudando a esas mismas casas de altos estudios, y más recientemente colaborando con agencias como la ASEAN en el desarrollo de programas educacionales para diferentes segmentos poblacionales. Son muchas cosas, pero si tuviera que escoger una de ellas en especial, me inclinaría por el adiestramiento educacional en materia turística.

¿Está usted profundamente convencido de la importancia del adiestramiento turístico como eslabón fundamental para el desarrollo del sector?

-Sí, lo estoy, y creo que debe darse a todos los niveles, desde la escuela hasta el desarrollo de líderes dentro del sector turístico. Desgraciadamente creo que adolecemos de buenos líderes en el turismo, y debiéramos incentivar el desarrollo de programas educacionales encaminados hacia ese fin, tanto por parte de las grandes compañías como de los gobiernos. Creo que la capacitación turística es clave y difícil, pero aun así se logra, y tiene una gran importancia para el futuro de la industria, especialmente en estos momentos.

¿Es este premio el momento culminante de su carrera, o tan solo el punto de partida para el inicio de nuevas investigaciones?

-Espero que sea un punto de partida para emprender nuevas cosas. Uno se siente muy honrado cuando es reconocido, pero no podemos ver esto como un obituario.

En estos tiempos de crisis que estamos viviendo, usted se refirió a los retos que enfrenta la industria. ¿Qué debieran hacer los gobiernos y las compañías para vencer esos retos?

-Yo pienso que el turismo enfrenta retos desde muchas direcciones, no solo a corto plazo, como esta crisis económica y financiera que estamos atravesando, sino también retos a más largo plazo, como son la sostenibilidad y el cambio climático. Creo que esas cosas van a cambiar el comportamiento de la gente a largo plazo, y es por ello que las empresas necesitan centrar su atención en todos los aspectos. Tienen que ser capaces de reconocer los problemas a corto plazo, pero no debemos apartar la vista de las dificultades a largo plazo.

¿Aun así cree usted que el futuro del turismo es promisorio, a pesar de esos retos que enfrenta ahora y otros muchos que están por venir?

-Creo que el futuro del sector va a ser diferente en todos los sentidos.

¿Dependerá eso en gran medida de lo que seamos capaces de hacer hoy?

-Creo que sí. Estos son tiempos muy difíciles.

Fuente: Caribbean News Digital