El 15 de noviembre estará plenamente operativa la nueva terminal Es casi cuatro veces mayor que la actual y tiene capacidad para 3 millones de pasajeros al año. En 13 días quedará inaugurado y en 55 estará operativo el nuevo Aeropuerto Internacional de Carrasco. Prácticamente cuadruplica el tamaño de la que aún es la principal terminal. La primera imagen del país para el viajero en clave futurista.
"En Uruguay todavía los amigos y las familias van a saludar a los que llegan, o a despedir a los que se van, por eso la terminal provee grandes espacios para los viajeros". Con estas palabras el arquitecto Rafael Viñoly explica el proyecto que en dos meses quedará operativo.
Una inversión de US$ 165 millones cuyo primer vistazo se podrá ver el próximo 5 de octubre, cuando el presidente Tabaré Vázquez, autoridades de gobierno y de la Corporación América que concesiona la terminal, con alrededor de un millar de invitados, dejen oficialmente inaugurado el nuevo aeropuerto. En rigor, se prevé que para el 15 de noviembre la terminal con capacidad para tres millones de pasajeros al año estén plenamente operativa.
La mole ocupa 45.000 metros cuadrados y la cúpula de 400 metros es quizá su rasgo fisonómico más destacado. Pero su interior depara más de una sorpresa. Tal como lo define el creador del diseño, su característica más saliente tal vez sean los enormes espacios y la luz natural a través de una superficie vidriada de 8.000 metros cuadrados en su parte superior.
Contará con cafeterías, salas VIP, dos locales de McDonald`s y una conocida firma en el restaurante principal.
EL EDIFICIO. Tendrá ocho puertas de embarque, cuatro de ellas equipadas con mangas telescópicas con 20 posicionamientos remotos para la circulación de pasajeros.
El edificio contiene las áreas de partidas, el hall de check-in, y la gran terraza mirador que busca un lugar de remanso para el encuentro de visitantes con familiares o amigos.
Según la información brindada por la empresa, el proyecto cuidó que los espacios públicos de arribos y partidas tuvieran el doble y triple de altura que los que cuenta el antiguo edificio.
La planta superior balconeará a la inferior y estarán conectadas por cuatro escaleras mecánicas y ascensores.
Toda la estructura busca, de algún modo, emular la geografía suavemente ondulada del país y, además de la apertura a la luz natural, procura integrar espacios verdes dentro de las calles de circulación.
El sistema de manipulación de equipajes será totalmente automatizado. Las cintas transportarán el equipaje de bodega desde el área de check-in, para las partidas, hasta el patio de salida de equipajes.
Pero antes de salir, el equipaje pasará por el sector técnico de inspección en el entrepiso, dotado de modernos sistemas de seguridad con equipos de rayos X.
Para los arribos, habrá tres cintas para el reclamo de equipajes, una de ellas con carrusel doble para atender vuelos de gran envergadura.
A modo de ejemplo, cabe recordar que un Boeing 747 tiene una capacidad para 460 pasajeros. Ello sin hablar de la mayor aeronave puesta en el aire hasta el momento y fuerte competidora de los Boeing, como es el caso de los Airbus, aviones de dos pisos con una capacidad de 550 pasajeros.
La infraestructura de la nueva terminal, entonces, aspira a colmar las exigencia de los vuelos intercontinentales. De hecho, con vistas a ello y como parte del mismo proyecto, la pista principal de aterrizaje de Carrasco, la 06-24, fue llevada a una longitud de 3.200 metros para permitir la operativa de estos gigantes del aire.
A grandes rasgos el complejo que abraza el gran óvalo central está dividido en tres sectores claramente definidos. Allí se encuentra el gran estacionamiento para el público, con capacidad para unos 1.200 vehículos, y dos vialidades laterales de acceso restringido, reservadas para los sectores técnicos y de servicio de la terminal.
Los accesos al edificio también fueron cuidadosamente diseñados para contar con veredas y calles anchas, aptas tanto para automóviles particulares, como para taxis y ómnibus. También estos accesos, dispuestos en dos niveles, impiden cruzamientos entre partidas y llegadas, que podrían llegar a complicar la circulación.
El amplio estacionamiento, que para dar una idea triplica la capacidad del actual, está a su vez organizado en sectores. Habrá áreas reservadas a funcionarios, así como a rentadoras de autos y taxis. Los accesos desde allí permitirán pasar al sector de arribos en la planta baja, y una segunda calzada para el sector partidas ubicado en la planta alta. Su configuración permite tanto ingresar directamente al edificio o al estacionamiento público.
CRECIMIENTO. La nueva terminal permite aspirar a duplicar largamente la cantidad de pasajeros, tanto como su propia estructura ya prevé futuras ampliaciones del complejo.
La nueva terminal permitirá incrementar la capacidad de la actual en un 150% del volumen de pasajeros.
En 2008, se cerró el ejercicio de Carrasco con 1.236.415 pasajeros. Ello supuso ya un aumento del 5,84% del volumen respecto al año anterior. La estimación de un crecimiento de un punto por cada punto de aumento del PIB, permitirá alcanzar la meta de los 3 millones en 2023, al finalizar la concesión. En ello gravitará la incorporación de un sector de pasajeros en tránsito.
De todos modos, se prevé que para alcanzar el cupo deberá transcurrir un proceso gradual. En tal sentido, el ministro de Transporte y Obras Públicas, Víctor Rossi, dijo a El País que confía en que estas metas se alcancen en el corto plazo debido a la envergadura de la obra. "Tenemos expectativas de que estas nuevas instalaciones sirvan por sí mismas como atractivo para el interés de nuevas compañías", señaló Rossi.
En tanto, también hay planes para la vieja terminal. Un posible centro de conferencias, es uno de los proyectos a estudio. (Producción: R. Rossello)
Free Shop duplica su espacio
El Duty Free del nuevo aeropuerto de Carrasco va a tener el doble de tamaño que el actual. Ocupará 3.000 metros cuadrados y será "el más grande de Sudamérica", aseguraron a El País fuentes del aeropuerto.
El área comercial contará con calles internas totalmente libres para el tránsito de los visitantes, entre las secciones de arribos y partidas de la terminal.
El Duty Free ha negociado con las principales marcas, incluso varias sin representación en América del Sur, según informó el presidente de la firma, Diego Arrosa a la agencia The Moodie Report.
Algunas de las marcas de alto prestigio son: Montblanc, Hermès, Nike, Puma, Tumi, Tommy Hilfiger, Columbia y Calvin Klein. También está la marca uruguaya Manos del Uruguay
En coincidencia con la idea central del proyecto diseñado por el arquitecto Rafael Viñoly, el espacio destinado a los locales comerciales será amplio, muy iluminado y apto para recibir la visita de miles de pasajeros que podrán circular con comodidad por las instalaciones.
El atractivo del Duty Free Shop descansa en el régimen de exención de impuestos tanto aduaneros como internos.
Los viajeros gozan de un régimen de franquicias de US$ 300, o su equivalente en otras monedas para mercancías adquiridas en Duty Free.
Las disposiciones aduaneras limitan el ingreso de bebidas alcohólicas y cigarrillos a dos litros y dos cartones.
Unos días más con desvíos en la ruta 101
Circular en las cercanías del Aeropuerto Internacional de Carrasco no ha sido sencillo en los últimos cinco meses. Ello se debe a los desvíos ocasionados por las obras en el empalme de las rutas 101 e Interbalnearia. Parte de ese tramo también involucra a los accesos a la terminal aérea.
Según informaron fuentes del Ministerio de Transporte y Obras Públicas, aún restan algunos días para llegar a la finalización de las obras que comenzaron en marzo pasado.
Los cambios en la circulación todavía vigentes afectan a las dos rutas. Para el tránsito desde Montevideo hacia el Este, se desvía a la altura del kilómetro 20,800 de la ruta 101, tomando a la derecha por camino Paso Escobar hasta tomar la Interbalnearia sobre el 21,600. Para el tránsito del Este hacia Montevideo es el mismo recorrido, en sentido inverso.
El tránsito de Montevideo a rutas 8 y 102 también sufre desvío al llegar al kilómetro 20,800 de la 101, a la derecha por Paso Escobar hasta el cruce semaforizado con la Interbalnearia, luego calle Roosevelt y calle Larrañaga retomando la 101 a la altura del 21,700. Para el camino inverso, desvía en el 21,350 de la 101, a la izquierda por Washington, Interbalnearia, Paso Escobar y la 101 nuevamente en el 20,800. El tránsito de rutas 8 y 102 al Este desvía en el 21,350 de la 101, a la izquierda por Washington e Interbalnearia al este, del este a estas rutas es el camino inverso.
fuente: El País Digital