En entrevista con Notimex, Torruco Marqués estimó que falta mucho para que la intención del presidente Barack Obama de liberar totalmente las restricciones para viajar a la Isla se concrete, pero los prestadores de servicios turísticos lo deben tomar en cuenta, pues "la apertura del mercado norteamericano a Cuba implicaría un reacomodo de los viajeros hacia el Caribe".

Recordó que en 2008 Cuba recibió 2.340.000 de turistas, que dejaron una derrama económica de 2.740 millones de dólares, una cifra 13% mayor que el año anterior, y agregó que en Estados Unidos ya hay un millón y medio de personas que mantienen vínculos familiares con la Isla.

El presidente de la Confederación Nacional Turística consideró que muchos estadounidenses tomarían la decisión de viajar a Cuba por razones que van desde la curiosidad, por ser un destino prohibido durante 50 años, hasta la cultura o el turismo de aventura.

En ese sentido sostuvo que los prestadores de servicios turísticos en Quintana Roo y en Guerrero, concretamente Acapulco, serían los principales afectados pues muchos estadounidenses preferirían ir a La Habana o Varadero, y señaló que en Cuba uno de los principales atractivos son los espectáculos nocturnos de nivel internacional, de los que carecen los centros de playa mexicanos.

“Por ello, aunque todavía pasará tiempo antes de que la medida se concrete y que se observe una competencia real, es momento de que los prestadores de servicios turísticos de Cancún, la Riviera Maya, Cozumel, Isla Mujeres y Acapulco mejoren sus productos”, concluyó.

Fuente:www.caribbeannewsdigital.com