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Viernes, 12 Octubre 2007 03:56

Camisa planchada, heladera llena

12 OCT 07 PDU
La vivienda-hotel para los nuevos nómadas del mundo laboral, un segmento con creciente demanda en toda Europa.
Camisa planchada, heladera llena, traducción lista sobre el escritorio. Son los nuevos apartamentos con servicio hotelero de 24 horas para ejecutivos móviles. Boardinghouses o estudios amueblados que disponen de recepción, servicios de traducción y secretariado, oferta gastronómica, garaje, gimnasio e instalaciones wellness. Hay un auténtico boom de la demanda de este tipo de establecimientos en las grandes ciudades de negocios europeas para los nuevos nómadas del mundo laboral.

Representativo de este modelo es el Frankfurter Eurotheum, el primer rascacielos de Frankfurt con viviendas en los pisos superiores. En sus suites de entre 35 y 75 metros cuadrados, con distintas distribuciones y cinco diferentes estilos de decoración, residen desde directivos de grandes consorcios hasta conocidos cantantes de ópera o directores de orquesta. "Nuestros clientes no tienen tiempo para hacer la compra o gestionar un coche de alquiler", dice Martina Müller-Frasch, directora del establecimiento, quien en más de una ocasión se ha encargado hasta de encontrar colegio para el hijo de algún directivo. En Alemania, la ciudad con una mayor oferta de boardinghouses es Berlín, con 3.000 viviendas; seguida de Múnich, Hamburgo, Stuttgart y Frankfurt. La oferta europea oscila entre pequeños estudios de 20 m² y penthouses de lujo con 150 m². También cadenas como Derag Hotels & Living ofrecen un sistema de servicios extras que permite configurar una "estancia a medida".


Nueva filosofía

El auge de este nicho de mercado de la hotelería se debe al impulso de la moderna filosofía del trabajo, en la que proliferan los proyectos en equipos internacionales que trabajan lejos de la sede de sus empresas. Es la alternativa a la triste pernoctación en un hotel anónimo. "Lo pide el mercado", apunta Thomas Beyerle, analista jefe de DEGI, la sociedad inmobiliaria de Allianz y el Dresdner Bank. "Nuestros clientes son gente de negocios que tras un largo día de trabajo no quieren regresar a la habitación apretada y monocorde de un hotel", afirma la berlinesa Anett Gregorius, que desde 2001 posee una plataforma de reserva en Internet de boardinghouses, apartamentos con amplios servicios y estudios para largas estancias.

El objetivo es ofrecer al cliente una segunda vivienda de ambiente personalizado y servicio flexible que le permita delegar todas las tareas que no pueda o quiera asumir. Normalmente disponen de una pequeña cocina y un despacho de trabajo. Se pueden reservar por días, semanas o meses, y es la solución para quienes no quieren prescindir de la autonomía que ofrece un pequeño apartamento ni tampoco de la comodidad y el servicio de un hotel, explica Gregorius, cuya agencia Boardinghouse Consulting coopera con Siemens para que sus 400.000 empleados puedan acceder a través de la intranet a su amplia oferta de apartamentos por todo el mundo.

El 80% de la clientela de Anett Gregorius es gente de negocios. Directivos, ingenieros, consultores, creativos o especialistas informáticos. El 20% restante lo conforman viajeros individuales; sobre todo familias que buscan para sus desplazamientos por ciudades europeas una fórmula alternativa al hotel convencional. Ofrece más de 5.000 "serviced apartments" en 20 ciudades alemanas y otros tanto en 22 países del mundo, pero le gustaría disponer en Europa de productos similares a los de mercados más avanzados en este segmento, como EE.UU, Australia y Asia, "con apartamentos de tres y cuatro habitaciones". Dos tercios de la demanda corresponden a estancias inferiores a un mes.  

Fuente: editur