La actriz española más internacional sufrió una ataque de histeria y tuvieron que bajarla del avión que iba a traerla a Barcelona.
Ocurrió el pasado 28 de junio. Penélope pretendía llegar a Barcelona desde el aeropuerto de Newark (Nueva York). El avión había empezado a rodar por la pista cuando la intérprete sufrió un ataque de pánico y el capitán tuvo que frenar, mientras el resto de la tripulación hacía todo lo posible por calmar a Penélope.
Su representante, Carrie Gordon, declaró a The Huffington Post que:
"Penélope Cruz no sufrió ningún ataque de pánico y el aplazamiento de varias horas del vuelo se debió a una tormenta".
La historia acabó con un final feliz. La actriz viajó hacia Barcelona en ese mismo avión.
PD / Agencias