Marko Kulju, de 25 años, podría enfrentar cinco años de cárcel o una multa de hasta US$16.000 por atentar contra uno de estos monumentos considerados por la UNESCO como patrimonio cultural de la humanidad.
El sujeto fue descubierto por una isleña que lo vio en pleno proceso de mutilación el pasado domingo cuando logró desprender el lóbulo de la oreja de una estatua que forma parte de un grupo de los tantos que adornan a la pequeña isla de 164 kilómetros cuadrados.
Multa para repararlo
Estos monolitos han cautivado por décadas a arqueólogos y turistas debido a su gran tamaño y al hecho de que aún se desconoce cómo fueron trasladados desde sus canteras originales de roca volcánica a los pedestales dispersos por toda la isla.
Se estima que el peso promedio de cada monolito es de unas 50 toneladas.
Un policía de la isla dijo que el turista que se encuentra detenido por tratar de apoderarse de un trozo de la escultura "tenía la intención de llevárselo como recuerdo".
La Isla de Pascua, conocida también como Rapa Nui o "el ombligo del mundo", fue colonizada por la cultura polinesia entre los siglos IV y XVI, y es parte de Chile desde el siglo XIX.
Al parecer los polinesios esculpieron estos monumentos para representar a personas fallecidas de alto rango social.
Paradójicamente todos los moáis fueron derribados de sus pedestales en el siglo XVII.
Poco a poco el gobierno chileno ha logrado erigir a muchos de estos monolitos sobre sus bases originales.
Muchos otros aún yacen en el piso seccionados en partes.
El moái dañado el pasado fin de semana podría ser reparado con el dinero de la multa que tendrá que pagar el turista finlandés.
fuente BBC Mundo