por AméricaEconomía.com
En medio de las turbulencias que afectan a los mercados, la canciller
alemana, Angela Merkel, encabeza junto a los principales organismos
financieros una iniciativa que impida el surgimiento de otro colapso
económico.
Santiago. El objetivo parece ambicioso. Evitar una futura crisis global como la que azota en la actualidad a los mercados del mundo, mediante una estructura financiera basada en la cooperación entre los gobiernos nacionales y organismos internacionales y teniendo en cuenta a los países emergentes y las naciones en vías de desarrollo.
Para lograrlo, la canciller alemana, Angela Merkel, impulsa la creación de un nuevo tratado económico global junto a los líderes de los principales organismos financieros internacionales y el resultado es la redacción de una "Carta para una Economía Sostenible". En un comunicado conjunto, Merkel y los directores del Fondo Monetario Internacional (FMI), la Organización Mundial del Comercio (OMC), el Banco Mundial, la
Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) dijeron que el tratado podría ser lanzado por los países del G20.
"Sólo el desarrollo efectivo de la economía social de mercado puede seguir garantizando el crecimiento económico", señala la declaración. "Para asegurar este desarrollo necesitamos un marco de trabajo integrador, respaldado por los estados y las organizaciones internacionales, que evite los excesos del mercado y procure contrarrestar crisis futuras", agrega.
La idea es, dijo Merkel, crear una nueva estructura financiera basada en la cooperación entre los gobiernos nacionales, los citados organismos internacionales y otros colectivos interesados, teniendo en cuenta a los países emergentes y las naciones en vías de desarrollo.
Se trata, añadió, de crear una gran red de comunicación sobre una amplia base para llegar a una economía global robusta, limpia y justa, dijo la canciller en rueda de prensa tras la reunión, en la que subrayó que el garante del crecimiento económico en el futuro sólo puede ser el desarrollo efectivo de la economía social de mercado.
Quienes impulsan la medida dijeron que la nueva "carta para la gobernabilidad económica sustentable" podía basarse en los instrumentos existentes de la OCDE sobre gobernabilidad corporativa, además de las líneas guías de la OIT sobre protección social y condiciones laborales.
Por su parte, el FMI advirtió sobre una caída más severa de la economía global si los gobiernos no emprenden rápidamente acciones para reparar el sistema financiero, eliminando los activos en problemas de los balances de bancos.
Según revela la agencia EFE, también se destaca que la lucha global contra el cambio climático debe seguir teniendo la más alta prioridad y se insiste en la importancia de la Cumbre Climática que se celebrará a final de año en Copenhague. Igualmente recuerdan que la crisis financiera y el retroceso económico tienen consecuencias graves para los países del Tercer Mundo, por lo que subrayan que la cumbre del G-20 deben tener en cuenta las necesidades de esas naciones y de los grupos sociales menos favorecidos.
En una breve intervención ante la prensa, el director general de la OIT, el chileno Juan Somavía, comentó que la carta propuesta por Merkel "es muy importante porque va mas allá de la superación de la crisis actual", al igual que "su iniciativa para crear un consejo social" que se convierta en parte de la ONU.
Proteccionismo. Merkel y los responsables de las organizaciones internacionales también hicieron público su respaldo a tomar medidas decisivas para la reforma de las leyes financieras globales en el G20 y advirtieron contra el proteccionismo.
"A pesar del estado problemático de la economía mundial en la actualidad, todos los países tienen el deber de resistir las tendencias proteccionistas, trabajar hacia una apertura mayor y tangible del comercio mundial y asegurar que sus paquetes de estímulo no perturben el comercio", decía el comunicado.
Prometieron trabajar hacia un acuerdo en la Ronda de Doha de conversaciones de comercio de la OMC el 2009 y mencionaron el cambio climático y la lucha contra la pobreza en los países en desarrollo como otras metas claves.
El tema del proteccionismo ya no es nuevo y cada vez genera más ruido. Las alarmas se encendieron durante la reunión del World Economic Forum (WEF), realizada recientemente en Davos. Los asistentes al evento no dejaron pasar la ocasión de criticar las medidas proteccionistas que desde el mundo desarrollado se están planteando para resolver la crisis. Algo que también es criticado desde las economías más avanzadas. "Si no hacemos nada, esto conducirá a un retroceso de la globalización y una reducción del comercio y de la actividad transfronteriza, a lo que le seguirá rápidamente el viejo proteccionismo comercial del pasado", dijo el primer ministro británico, Gordon Brown.
A su vez, el ministro brasileño de Relaciones Exteriores, Celso Amorim, afirmó que el sesgo proteccionista presente en el paquete de estímulo estadounidense no es una buena señal. Recordó que el plan aún debe aprobarse en el Senado y que el presidente Obama tendría la oportunidad de vetarlo. Lo que no sería fácil en este momento, reconoció el secretario de Estado. "Por otro lado, nos animamos cuando el presidente Obama, hablando con Lula, declaró que la Ronda de Doha es importante y necesita ser concretada, dijo. "Las dos cosas no van en el mismo sentido, los aspectos deben ser aclarados
Con información de Reuters y agencias.