Leadgate Investment por considerar que el negocio "no es ajustado a derecho".
La resolución del TCR, señala que un decreto emitido por el gobierno para convalidar lo actuado en el caso "no resulta procedente" ya aque el Poder Ejecutivo "carece de competencia" para aprobar este tipo de contratos y que se debería haber aprobado una ley.
Agrega el organismo de contralor que en la oprtunidad, el contrato no cumplió con "los principios generales básicos en materia de contratación administrativa como la publicidad, la igualdad de los oferentes y la concurrencia".
Pero hay otras irregularidades, según el Tribunal; el gobierno aceptó garantizar diversas opbligaciones y contingencias, "que comprometen la realidad económico-financiera del Estado, en forma directa, por montos intangibles".
Añade asimismo que el Estado, a pesar de poseer solamente el 25% del capital accionario de la nueva sociedad, "garantiza en forma soberana el 100% del monto a financiar para la adquisición, arrendamiento y leasing de aeronaves, a quien PLUNA y los nuevos accionistas designen. En cambio éstos últimos (Leadgate), poseerán el 75% del capital social.
Las observaciones continúan y también se cuestiona la cláusula 4.2 por la cual, las partes dan su conformidad, para aprobar su balance al 30 de junio de 2007 y el balance previo "que sea necesario para aprobar el reintegro de capital". Para el Tribunal, esto escapa a las posibilidades de las partes pactar"que sus representantes darán anticipadamente su conformidad en la aprobación de tales balances cuando éstos no se conocen aún.
El TCR califica como improcedente que los firmantes del acuerdo hayan sido los ministros de Economía y Finanzas, Danilo y Astori y el de Transporte y Obras Públicas, Víctor Rossi, ya que ellos no representan al Poder Ejecutivo, salvo que una resolución así los faculte o que el presidente, hubiese firmado junto a ellos.
Cuando se habla de las garantías que aporta el estado, se hace directa referencia al hecho que se dijo públicamente que el Estado garantizaba 150 millones de dólares por la compra de los CRJ900 Bombardier y un comunicado de prensa, que figura en la web de la empresa canadiense, con fecha 9 de julio, indica que se recibió "una orden de compra" (no habla de leasing), por parte de PLUNA, en primera instancia por 7 aviones y un importe aproximado de 261 millones y que, si se completa el pedido, o sea, los 15 Bombardier, la cifra trepa a los 571 millones de dólares.
Como se puede apreciar, no son nada halagüeñas las noticias para PLUNA.