Alexander Schoppman, de 56 años, fundador de las Aerolíneas Internacionales de Fumadores- Smintair- concibió la idea de crear un paraíso para fumadores en el aire después de haber comprado pasajes de no fumadores muy caros y con muy pobre servicio.
"Estaba tan enojado con los tickets que subían de precio mientras que el servicio empeoraba" dijo Schoppmann, quien fuma 20 cigarrillos por día.
Tan pronto los vuelos de Smintair empiecen, fumar será permitido en 138 asientos a bordo, en un espacioso Boeing 747. Las líneas Aéreas pueden llevar hasta 559 pasajeros en un 747.
"La tripulación puede fumar también" dijo el antiguo corredor de bolsa.
Schoppmann vino con la idea mientras Alemania considera imponer mayores restricciones, ya que en este momento es el país con menos restricciones en Europa. Los alemanes han tenido resistencia a regulaciones sobre fumar porque les viene a la memoria Adolfo Hitler, quien prohibía hacerlo en lugares públicos.
Por Eva Kuehnen, Reuters - Berlín.
Nota recomendada y traducida por Eduardo M. Bensusán.
