según señala Patrick Collins, profesor de economía de la Universidad Azabu, en Japón.
Millones de personas al año querrán viajar a la Luna, dice Collins, y eso implicará crear y mantener nuevos servicios. Ninguna industria generará más empleo, señala, pues la demanda de viajes espaciales será ilimitada. El turismo espacial generará empleos para millones de personas en la Tierra. El mito de que nadie quiere viajar al espacio o que es un lujo para gente extremadamente rica es simplemente falso.
La industria hotelera deberá tomar la delantera en el desarrollo del turismo lunar y las infraestructuras necesarias. Una vez que sean reducidos los costos por lanzamiento y la estructura sea desarrollada, el nivel de financiamiento requerido para construir un hotel lunar será costeable, señala. Una vez que empiece, el turismo lunar y otras industrias relacionadas en varias órbitas crecerá progresivamente junto a varias compañías de transporte, añade.
Pero, ¿qué incluye un viaje a la Luna? Un boleto de ida y vuelta, que mantendrá en órbita al viajero durante diez días o dos semanas. Collins prevé edificaciones seis veces más altas que en la Tierra, con una cúpula enorme llena de aire a presión. Esto permitirá el sueño milenario de poder volar como los pájaros, señala. Volar y los deportes aéreos serán las grandes atracciones. Habrá una piscina sin gravedad y en la noche veremos el ballet volador.
Fuente: wfs.org