para ponerla en marcha, informó hoy la prensa local.
Como reseñó Efe, Morales aprobó este miércoles el decreto de la nueva aerolínea, proyecto que comenzó a considerar en marzo pasado por la suspensión de Lloyd Aéreo Boliviano (LAB) por problemas económicos y de seguridad de esa empresa privatizada.
El director general de Aeronáutica Civil, Javier García, dijo al rotativo La Prensa que Bolivia espera la ayuda de Cuba y Venezuela, los mayores aliados del izquierdista Morales, en su proyecto de creación de una aerolínea estatal.
García recordó que los acuerdos de la Alternativa Bolivariana de las Américas-Tratado Comercial de los Pueblos (ALBA-TCP) incluyen el fomento de líneas aéreas estatales.
El anterior ministro de Transportes, Jerjes Mercado, que dimitió en septiembre por escándalos de corrupción, dijo en agosto que la nueva aerolínea tendría una inversión inicial de 15 millones de dólares y cinco aviones Boeing 737.
Mercado explicó entonces que Morales le pidió que la nueva aerolínea estuviera operando antes del 18 de diciembre próximo.
Según La Prensa, el gerente general de Bolivariana de Aviación será nombrado directamente por Morales, pero fuentes del viceministerio de Transportes dijeron a Efe que no es cierto.
La Superintendencia de Transportes suspendió a fines de marzo los vuelos de LAB hasta que acreditara su capacidad operativa y financiera, tras cancelar sus viajes a España porque no podía pagar el combustible ni el seguro de los aviones.
El secretario general de LAB, Gustavo Viscarra, dijo hoy a una emisora de radio local que la creación de BoA "apunta a la liquidación del Lloyd".
Según Viscarra, el mercado boliviano está "saturado" con cuatro aerolíneas: Aerosur, la única que opera actualmente; Aerolíneas Sudamericanas, todavía en gestación; LAB, que tiene hasta el 20 de noviembre para volver a volar o perderá su licencia, y la nueva empresa estatal.
"La demanda que tenemos en el país es muy restringida y no creo que dé para que las cuatro puedan subsistir", dijo Viscarra, y agregó que subsistirá "la que tenga los mayores recursos humanos y de infraestructuras, y LAB tiene mucho por delante en ese sentido".
Viscarra aseguró que las dificultades de su empresa, que pretendía volver a volar en septiembre, son culpa "del embate" que sufre el LAB "de parte de algunas instituciones dependientes del Estado".
Fuente: aerovia/eluniversal