La situación creada por causa del diferendo originado en la instalación de las pasteras, nos muestra una realidad diferente a la que nos habíamos acostumbrado a vivir en el turismo receptivo uruguayo.

El segmento "movilizador" de nuestras costas, integrante del universo del mercado tradicional argentino estival, al parecer, en los próximos tiempos estará ausente.

Las autoridades públicas y privadas de nuestro país, han dirigido el máximo esfuerzo de promoción al Estado de Río Grande do Sul.

Nosotros no decimos que la mencionada estrategia sea equivocada ni mucho menos.

Si decimos, lo hemos reiterado, no es la mejor, no es la que puede arrojar los más positivos resultados posibles.

Una estrategia sugerida fue publicada el 11 de setiembre de este año en el artículo: Cien charters en el verano

No se hizo, ya no no es posible estructurarla para el próximo verano.

Lo que vamos a sugerir hoy, lamentablemente tampoco será para ejecutar de inmediato pero, cuando todos estamos mirando hacia la costa, cuando todos ya tenemos los radares orientados a los diferentes puntos de ingresos de turistas para ir midiendo el referido flujo, es buena cosa comentar otra estrategia posible, necesaria, accesible.

Razonemos: ayer mismo, editamos un interesantísimo artículo del colega Ronaldo Franca, de la prestigiosa Revista Veja (está aún en portada) donde se indica que la mitad de los brasileños no sabe ubicar a Brasil en el Mapa Mundi ; que solamente el 18% de los norteños puede decir donde está Estados Unidos y que el 84% de los ciudadanos del país del norte, no sabe que su territorio tiene frontera con Argentina.

¿Imaginan cuánto dinero habría que disponer para realizar una efectiva campaña publicitaria en ese mercado para promover el Destino Uruguay?

¿Se tienen en cuenta estos datos en el momento de fijar las pautas?

Nuestro consejo, nuestra sugerencia, es el márquetin directo.

¿Cómo?

Fácil y de ingenio.

Hay que apuntar las baterías a San Pablo; creemos que tal aseveración no admite discusión por múltiples factores.

Habrá que crear un  "comando interdisciplinario" cuyo objetivo sea montar un calendario de eventos para promover ante la sociedad paulista, el Destino Uruguay.

Con el nivel que exige el alto estándar del mercado al que se apunta, "mostrar" nuestra cultura, nuestra gastronomía, nuestros paisajes, en verdaderos megashows con todo lo que tienen que tener.

El más cuidado, el más completo, el más eficaz, calendario de eventos en este marco, costará apenas un pequeño porcentaje de lo que podría significar una campaña masiva en los medios brasileños.

Con estas acciones, crearíamos las condicionantes ideales para promover el "boca a oreja" (el manido "boca a boca" es inoperante, lo que dice la boca no lo oye otra boca) dentro del mayor mercado regional al que podemos aspirar. Nos vemos.