20 DIC 07 PDU
Desde hace unos días, nos cuentan todos los pasos del dictador apresado de apellido Alvarez
Que preguntó si había mucamas en la cárcel.
Que mostró las manos esposadas.
Que le preguntó al juez Charles si estaba obligado a darle la mano.
Que dijo que quería defensor de oficio y si fuera posible, comunista.
Que predijo que va a estar poco tiempo detenido.
Nos somos ni nunca fuimos proclives al olvido. Queríamos justicia. La estamos viendo actuar.
Lo que no queremos, lo que nos cuesta digerir, es el regodeo. No nos causa placer verle la cara a ese señor y menos saber que sigue en la creencia de su omnipotencia.
Guardado está; que allí permanezca.
En el silencio, el mismo silencio que impuso a muchos
SAH