en el Ministerio de Trabajo para regularizar las actividades en Aerolíneas Argentinas.
La medida tomada por el fin de semana por APLA implica que los pilotos no aceptan tomar los vuelos reprogramados, lo que impidió la salida de los vuelos a Barcelona de la noche del domingo y el vuelo a Sydney y Auckland que debía partir a primera horas de ayer.
La reprogramación de vuelos es una medida usual de la actividad aerocomercial, con lo cual, no hay duda que la decisión de Jorge Pérez Tamayo y Pablo Biro en nombre de APLA fue romper las negociaciones ordenadas por el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner para resolver la incesante cadena de conflictos que afectan a Aerolíneas Argentinas.
Directivos de Aerolíneas Argentina están anunciando a funcionarios de la cartera laboral del recrudecimiento del conflicto y queda en duda el encuentro que en horas del mediodía iban a tener hoy martes en la cartera laboral funcionarios del Ministerio de Trabajo, representantes de Aerolíneas Argentinas y el Grupo Marsans y APLA.
En la última edición semanal de CÓDIGO AÉREO, ya se había planteado que las negociaciones que conduce Carlos Tomada y Norma Rial en la cartera laboral estaban a un paso de fracasar dada la dureza que habían mostrado en las charlas realizadas en el edificio de Leandro N. Alem 650.
El jueves pasado, Pablo Biró, vicepresidente de APLA, había explicado que el gremio estaba en "estado de alerta y movilización" dado que "seguramente van a volver las demoras y reprogramaciones de vuelos, pero como fruto de la inoperancia de la empresa, que todavía ni nos depositó los sueldos en tiempo y forma".
Es interesante, pero las declaraciones realizadas por el gremialista se realizaban en el mismo momento que se acreditaba el dinero en las cuentas de los pilotos y que las "demoras y reprogramaciones de vuelos" son algo común en una aerolínea que tiene más de 100 vuelos diarios.
Como excusa de la medida de fuerza tomada desde ayer, Biró reiteraba la semana pasada, viejas denuncias: "hay flotas donde la mitad de los pilotos no tienen auriculares, que son obligatorios y básico para poder volar", algo que fue desmentido por la empresa.
También alertó sobre un "vaciamiento" que la compañía realiza, según Biró, dado que "se usan los recursos de Aerolíneas (Argentinas), en beneficio de Austral", justo en la misma semana cuando ingresó un nuevo Boeing 737-500 a la compañía y se espera, en pocas horas más, la llegada del primer A 320 de Aerolíneas Argentinas.
Pero lo más grave es que Biró no deja posibilidades de una solución de corto o largo plazo. En declaraciones a la agencia Noticias Argentinas, el gremialista aseguró que "no queda ninguna posibilidad de encontrar una solución al conflicto" y sentenció: "se acabaron las instancias de conciliación voluntaria".
Biró le dijo a la agencia de noticias que los pilotos mantiene "un muy buen diálogo con el Gobierno", y precisó: "pero el conflicto es con la empresa".
A comienzo de la semana pasada, Jorge Pérez Tamayo había asegurado que "el diálogo siempre ha existido, pero no vamos a permitir que Aerolíneas Argentinas no sea la línea aérea que tiene que ser. Vamos a exigir que nos den todo lo que la empresa ha firmado y homologado en Trabajo"-
Se desconoce cuales serán la decisiones del gobierno a partir de ahora.
* En base a: Código Aéreo