Mata les dijo entonces a sus seguidores que todo estaba consensuado con el gobierno y que el tema rutas era prácticamente un trámite administrativo.
Sin embargo, transcurridos seis meses Air Pampas sigue sin tener aviones ni, lo que es peor, rutas.
O Mata entendió mal o alguien le prometió desde el gobierno algo que no estaba dispuesto a cumplir.
Nunca quienes estaban junto a Mata en este proyecto aceptaron hablar con el periodismo, hasta estas dos últimas semanas.
Fue entonces cuando uno de los gerentes más cercanos al empresario español "pidió" una nota en una de las revistas más importantes de la industria turística y tres de las espadas más cercanas a Mata -Mario Pimentel, Roberto Devesa y Carlos Mateu- aceptaron un reportaje, el primero, pedido por El Cronista Comercial.
Si bien ninguna de las notas agrega demasiado a lo planteado por Aviación News en agosto, la explicación sobre este cambio de estrategia obedecería básicamente a llevar un mensaje al frente interno.
Al margen de un par de pilotos que habrían optado por abandonar el barco para sumarse a otras empresas, habría cierta preocupación en la gente que solo cuenta con una promesa o trabajan a destajo -en la nota reconocen que la empresa tiene solo 14 empleados- y ven como el proyecto se dilata una y otra vez.
Para peor Mata carga con el estigma de haber anunciado muchos proyectos que nunca se cumplieron.
Otra manifestación pública de Air Pampas esta semana fue un aviso de salutación al número uno del diario Crítica de la Argentina de Jorge Lanata.
Esto no tendría nada de malo si no fuera porque la empresa todavía no tiene ni aviones, ni rutas, ni fecha de despegue.
fuente: Aviación News