a nivel doméstico, y como un gesto a las nuevas autoridades de la Unión de Aviadores de Líneas Aéreas (UALA).

Desde que llegaron a la Argentina, los A 320 que sumó el Grupo Marsans a Aerolíneas Argentinas descansan en Ezeiza y no vuelan por una decisión tomada por la combativa Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) que dejó a las naves sin pilotos para poder volarlos. Por eso, la empresa habría tomado la decisión de devolver las naves a sus leasors, como informó CÓDIGO AÉREO hace un mes.

Sin embargo, la posibilidad de que el Grupo Marsans devuelva las naves o no sean incorporadas a la flota los otros dos A 320 pendientes, como se comprometió el holding ante Cristina Fernández de Kirchner, fue muy mal recibido por las autoridades.

En ese marco, los directivos de Aerolíneas Argentinas estarían analizando por estas horas pasar los aviones a Austral Líneas Aéreas, lo que sería leído como un gesto de confianza y buena voluntad hacia la nueva conducción de la Unión de Aviadores de Líneas Aéreas (UALA) que recién acaba de cambiar (ver aparte).

En la actualidad, sobre 24 aviones, Austral Líneas Aéreas tiene volando sólo se encuentran operativos 10 MD y se espera llegar a 14 para las vacaciones de invierno, pero con el aumento de frecuencias y mayor demanda en el mercado interno, los A 320 podrían ayudar a compensar las naves que están paradas en espera de revisiones técnicas o partes.

Aerolíneas Argentinas tenía listos para traer al mercado local otros 2 A 320. Uno de ellos se encontraba en Toluca (México) y otro en El Cairo (Egipto) donde se les estaba realizando el c-check necesario para poder presentarlo ante la Fuerza Aérea Argentina para que otorgue las autorizaciones necesarias para volar. Sin embargo, aún hoy no tienen fecha de ingreso para el mercado local por la negativa de APLA de volarlos.

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