Las fuerzas de seguridad chinas utilizarán aviones por control remoto
durante los Juegos para patrullar los cielos de Qingdao, sede de las
regatas olímpicas.
Las fuerzas de seguridad chinas utilizarán aviones por control remoto durante los Juegos para patrullar los cielos de Qingdao, sede de las regatas olímpicas, en busca de actividades sospechosas.
Esta será la primera misión conocida de los aviones espías en la historia de China y las naves, de un metro de longitud y capacitadas para enviar fotografías e imágenes de vídeo a los puestos de control, realizaron esta semana algunas pruebas para comprobar su fiabilidad.
Uno de estos aviones, en Jinan, capital de la provincia de Shandong (este), fue enviado con éxito a espiar a través de una ventana de un tercer piso.
Cada una de estas naves, que vuelan bajo sin hacer prácticamente ningún ruido y tienen una autonomía de una hora para recorrer varios kilómetros cuadrados, cuesta casi 150.000 dólares, aunque las autoridades militares no han revelado el número de unidades que utilizarán.
La ciudad costera de Qingdao, de 550.000 habitantes, recibirá a 464 atletas procedentes de 65 países para participar en once pruebas de vela.
La seguridad es la prioridad número uno de China para los Juegos de Beijing, por eso en la capital china, en las inmediaciones del Estadio Olímpico, han sido instaladas lanzaderas de misiles tierra aire de fabricación local.
Beijing ha preparado un enorme dispositivo de seguridad, en el que lleva trabajando, con colaboración internacional y expertos en la lucha contra el terrorismo, prácticamente desde el mismo momento en que consiguió la organización de los Juegos Olímpicos.
AviacionDigital