tenga que ver con las medidas gremiales, "todas las aerolíneas del mundo sufren por el aumento del petróleo y la mala administración, que da pérdida. Nosotros no somos los responsables de estas situaciones".
El titular del gremio manifestó que las medidas gremiales que se aplican en el Aeropuerto de Carrasco implican una demora en los servicios para "mantener la capacidad del sistema".
"Se realiza un espaciamiento de 10 minutos entre los vuelos para mantenerse dentro de lo que la administración definió como la capacidad del sistema, es decir la cantidad de aviones que se puede manejar por horas", aclaró Reyes.
Los controladores aéreos denuncian las irregularidades en el servicio desde hace varios meses. El gremialista recordó que el año pasado se comprobaron las denuncias efectuadas en el Parlamento y ante autoridades del Ministerio de Defensa.
Actualmente se mantienen reuniones con el Ministerio, y es factible que en el correr de la semana podría realizarse una nueva reunión con el titular de la cartera, José Bayardi.
Reyes comentó que actualmente "los desincentivos, los bajos salarios, las malas condiciones de trabajo" revelan otra realidad que aqueja al sector: la emigración de los controladores aéreos uruguayos a otros países "donde ganan cuatro veces más".
En Uruguay hay unos 100 controladores aéreos, en el Aeropuerto Internacional de Carrasco trabajan unos 70.