El Gobierno brasileño intenta evitar los despidos, a fin de evitar que la crisis tenga un impacto directo en los trabajadores. La semana pasada, el presidente Lula se indignó con el anuncio de despidos al recordar que la empresa recibió dinero del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social, y por este motivo, debería haber avisado al gobierno sobre los despidos.

Sin embargo, el presidente de la Embraer, Frederico Curado, descartó la revocación del recorte de puestos de trabajo, y agregó que las razones detrás de los despidos están fuera de Brasil, donde se generan más del 90 por ciento de las ventas.

También afirmó que el restablecimiento de las contrataciones ocurrirá cuando el mercado internacional se recupere y que la empresa no planea nuevos despidos, estudiando acciones para minimizar el daño a los trabajadores despedidos con el compromiso de pagar su plan de salud a estos y sus familares por un año.

Redacción Portal del Uruguay
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