Símbolo de libertad y democracia y destacada atracción para los turistas, la estatua era una de las primeras cosas que veían millones de inmigrantes que llegaban al puerto de Nueva York en los siglos XIX y XX.
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El Servicio del Parque Nacional cerró la corona porque el acceso a la parte superior de la estatua, que representa a una mujer con una antorcha, se limita a una estrecha escalera con una barandilla en un lado. En caso de emergencia, no hay una salida rápida.
No todos tendrán acceso, declaró Salazar. Una lotería elegirá quién irá a la corona.
Aunque el número de visitantes a "Lady Liberty", un regalo de Francia en 1886, ha caído en los últimos ocho años, la cifra está subiendo de nuevo.
Unos 3,2 millones de personas visitaron la estatua en 2007, desde los 2,5 millones de 2006, pero por debajo de los 3,6 millones en 2000, dijo el servicio de parque.